Me moría de cansancio así que tuve que dejar de escribir. La verdad es que todavía estoy muy adolorido. Ese desgraciado de Kyle no es tan débil físicamente como aparenta, me sorprende no haber terminado con huesos rotos. Honestamente, y aunque llegue a sonar algo arrogante, me enorgullecen todas las noches de las que he salido victorioso desde que descubrí mis nuevas habilidades, y sin contar ni una sola derrota. Sé que incluso podría derrotar a mi padre si me encontrara con él.
Bueno, regresando al tema, me quedé dormido y ahora, a las 5:22 a.m. me despertó una sed de perro (demasiada similitud, que ironía). Fui por agua y regresé, y ahora se me ha ido el sueño. La verdad es que me decidí a escribir, porque ya no soporto pensar. Suena estúpido si lo digo así, pero es cierto. Uno antes de dormir da vueltas en su mente a lo ocurrido en el día, recuerda las vergüenzas y errores que cometió, piensa en una persona (no precisamente a quien ame) y empieza a recordar cosas del pasado. Este tipo de pensamientos me agobian, y ya no me siento seguro ni en mi propia mente, sobre todo con un sujeto que lee mentes a mí alrededor. Y hablando de este sujeto, ahora mismo está tirado durmiendo (o desmayado, no se la diferencia) a un lado de mi cama, porque ni aunque tuviera muchas energías y no quisiera dormir le cedería a alguien mi pertenencia más preciada y el único lugar en el mundo en el que puedo descansar, mucho menos ahora con mi sentido del olfato súper desarrollado, pues no podría dormir allí hasta que su olor y su esencia desaparecieran. De hecho empiezo a arrepentirme de haberlo traído aquí. Pero en fin, sé que algún día tendrá que regresarme el favor, pero dudo estar algún día en su situación. Continúo con lo que escribía.
Ayer nos encontrábamos Lenz y yo yendo hacia el parque Minion a la hora que acordamos. Kyle y John ya estaban allí, cosa que no me sorprendió. A pesar de que no sabía exactamente a que me estaba enfrentando me sentí muy seguro. Vi que los ojos de Kyle estaban más raros que nunca, y John no dejaba de murmurar tonterías, y Lenz tampoco.
-¿Qué dices?
-Que estas demasiado quieto-repitió Lenz levantando un poco más las voz.- Y sé muy bien, que no es por prudencia.
-No sé de qué me hablas.
Lenz iba a responderme algo, pero ya estábamos muy cerca de esos dos monstruos. Luego entendí a que se refería Lenz. Esos impulsos, la ira y el éxtasis estaban ausentes en aquel momento, aunque la luna estaba a punto de aparecer. Aun no se qué diablos me ocurría en aquel momento. Me importó poco, la verdad no podía imaginarme a mí siendo derrotado por Kyle o por John. Enseguida recordé que no conocía las habilidades de Lenz además de la de leer mentes. Pensándolo bien, desde que lo vi por primera vez, hasta ahora, no siento que se trate de un monstruo, es anormal eso sí, pero no es exactamente un monstruo. Por cierto, entre personas como yo, ser llamados ‘’monstruo’’ es un alago.
Mientras pensaba todo esto Lenz y Kyle hablaban, no preste atención. Yo estaba distraído viendo a la nada. Ninguno de nosotros parecía dispuesto a iniciar la pelea excepto John, la persona que menos tiene que ver en este conflicto.
-¡Ya basta! ¡Ya se oculta el sol!-grito John desesperado. Todos volteamos al cielo buscando la luna que ya lograba distinguirse en el cielo. Necesitaba que me cubriera por completo. Mientras estábamos los tres distraídos, John me atacó. Era prioridad para ellos el evitar que me transformara. Apenas logré reaccionar al golpe de John, que pudo haberme dejado fuera de combate enseguida, considerando su fuerza anormal. Mientras yo huía de los golpes de John, Lenz combatía a Kyle. No observé bien lo que ocurría en el otro combate, yo tenía mi propio problema. Comenzaba a sentir la intensa jaqueca. John acertaba sus golpes con mayor frecuencia, y a este dolor se sumaba el de mis huesos. Estos intensos dolores eran mi aliento. No hacíamos lo que acordamos (que Lenz se encargaría de John) pero en aquel momento no pensábamos en eso, y al parecer nuestros contrincantes habían hecho lo mismo que nosotros. Al ver que John no había logrado aniquilarme, y que el cielo estaba más oscuro, Kyle decidió cambiar de contrincante. Solo sentí que sus asquerosas manos frías me tomaban del cuello. Me volví hacia a él y lo vi convertido en un monstruo. Y pensaba que ya era feo y asqueroso. Su piel se volvió rojiza. De sus dedos salían unas garras como de lagartija que me rasgaba el cuello, y su aliento olía asqueroso. De su espalda salían dos alas emplumadas, que a mi parecer eran pequeñas para su levantar su peso. Emprendió el vuelo con mi cuello entre sus manos. Ya comenzaba a transformarme. Ya habíamos alcanzado una gran altura, luego Kyle comenzó a descender a una velocidad peligrosa que de haber ido contra el suelo nos habríamos muerto los dos. Nos hundimos en la laguna. Recordé lo que Lenz dijo sobre las salamandras. Hice conforme a mi instinto y lo mordí en el cuello. Note que sangraba mucho, lo que también me indicó que me había transformado. Kyle me soltó y salió del agua. Lo imite. Al salir a la superficie inhale como nunca en mi vida. Salí de la laguna. Me sorprendió un poco el hecho de que pudiera nadar convertido en hombre lobo, ya que como humano jamás había nadado. Vi a Kyle jadeando echado en la tierra, jadeando y cubriéndose la herida con la mano. No pensaba como humano en aquel momento. Fui precipitadamente hacia a él decidido a destrozarlo, a medida que me acercaba, se erguió y mostró sus dientes afilados y amarillos. Me di cuenta por primera vez que mi mandíbula (sospecho que también mi cráneo) había crecido demasiado, pues recuerdo que le mordí la cabeza y la mitad de su cráneo estaba en mi hocico. Ahora entiendo el por qué de las jaquecas.
Después de eso Kyle quedó fuera de combate, sinceramente no creo haberlo matado. Busqué a mi próxima víctima, a John. Los vi a lo lejos, aun seguían peleando, fui tan rápido como pude hacia ellos.
Cuando me encontraba a medio camino las nubes cubrieron la luna, y comencé a retorcerme nuevamente de dolor. Estaba volviendo a mi forma humana, y de una forma violenta. Nunca antes me había pasado esto. Sentí que la cabeza me iba a estallar, y que todos mis huesos se quebraban a la vez. Creo que mis gritos resonaron en cada calle de la ciudad y además alarmó a la gente, y por eso, para desgracia de nosotros que nos divertíamos, llegó la policía. John y Lenz se quedaron inmóviles esperando que los oficiales no los vieran. Estaba oscuro, y los policías estaban muy lejos para vernos. Otro infortunio. La nube que tapaba la luna se había movido. No tengo que repetir la historia de mi sufrimiento de nuevo. Mi corazón estaba vuelto loco. Con el apoyo de la luz de la luna y el escándalo de mis horrorosos gritos la policía nos encontró. Eso me importo poco, ya estaba convertido en hombre lobo. John había huido ya y Lenz estaba petrificado. Los policías al verme enloquecieron, algunos huyeron como maricas, otros sacaron sus armas y me apuntaron. Al ver la amenaza de los valientes (o tontos) policías les rugí como la bestia en que estaba convertido. Ya me había decidido a saltar sobre ellos, pero algo me distrajo, era Lenz que gritaba como loco tratando de llamar la atención de los policías, pero la mayoría no podía quitarme la vista de encima. Me volví hacia a ellos, y me sorprendí al ver que todos los oficiales estaban tirados sobre el césped. Después de eso no recuerdo muy bien que pasó. No era muy tarde. Nuestro combate no puedo haber durado más de dos horas, supongo. Creo que vine a mi casa convertido en hombre lobo, cosa que ahora creo que había estado haciendo cada luna llena, pues no encuentro otra teoría para explicar cómo es que amanezco tirado en mi cama. Recuerdo que traje conmigo a Lenz porque estaba tirado inconsciente, se desmayó al mismo tiempo que los policías, o eso creo. Debo prestar más atención. Pensé que tal vez ser trataba de la misteriosa habilidad de Lenz, y que se desmayó porque estaba muy agotado por la pelea contra esos monstruos. Y así fue como término este día. Ahora sé lo que pasará durante las noches brumosas; me transformare varias veces y llamaré la atención de los policías. Tendré que prever con tiempo y buscar un lugar apartado, o si no me volveré famoso y los monstruos no dejaran de perseguirme. Me pregunto si aunque el cielo estuviese completamente nublado me transformaría. Nota: Preguntar a Lenz sobre sus poderes y qué tipo de mutante es.
sábado, 23 de octubre de 2010
Continuacion...
Publicado por Stein Adler en 15:11
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